viernes, 15 de julio de 2011

Mas informacion de los Sonometros

En todos los países, normas nacionales e internacionales clasifican los sonómetros en función de su grado de precisión. Se establecen 4 tipos en función de su grado de precisión. De más a menos:
  • Sonómetro de clase 0: se utiliza en laboratorios para obtener niveles de referencia.
  • Sonómetro de clase 1: permite el trabajo de campo con precisión.
  • Sonómetro de clase 2: permite realizar mediciones generales en los trabajos de campo.
  • Sonómetro de clase 3: es el menos preciso y sólo permite realizar mediciones aproximadas, por lo que sólo se utiliza para realizar reconocimientos.
La norma IEC 61.672 elimina las clases 0 y 3, restando exclusivamente las clases 1 y 2.
La circuitería electrónica permite al sonómetro realizar diversas funciones. Por ejemplo:
  • Los sonómetros suelen disponer de un interruptor etiquetado como Range (rango) que permite elegir un rango dinámico de amplitudes específico, para conseguir una buena relación señal-ruido en la lectura. Por ejemplo, puede haber tres posiciones: 20-80 dB, 50-110 dB o 80-140 dB. De estos intervalos, el más usado es el segundo que va desde el nivel de confort acústico hasta el umbral de dolor. El tercer tipo es el que se utiliza para medir situaciones de contaminación acústica muy degradada. Los sonómetros más modernos y de mejor calidad tienen rangos tan elevados, por ejemplo, 20-140 dB, que se asegura una medida correcta en la mayoría de las ocasiones.
  • En los llamados sonómetros integradores, el interruptor etiquetado como Weighting permite seleccionar la curva de ponderación que va a ser usada:
    • Curva A (dBA). Mide la respuesta del oído, ante un sonido de intensidad baja. Es la más semejante a la percepción logarítmica del oído humano, aunque los estudios de psicoacústica modernos cuestionan esta afirmación. Se utiliza para establecer el nivel de contaminación acústica y el riesgo que sufre el hombre al ser expuesto a la misma. Por ello, es la curva que se utiliza a la hora de legislar
    • curva B (dBB). Su función era medir la respuesta del oído ante intensidades para intensidades medias. Como no tiene demasiadas aplicaciones prácticas es una de las menos utilizadas. Muchos sonómetros no la contemplan
    • curva C (dBC). Mide la respuesta del oído ante sonidos de gran intensidad. Es tanto, o más empleada que la curva A a la hora de medir los niveles de contaminación acústica. También se utiliza para medir los sonidos más graves
    • curva D (dBD). Se utiliza, casi exclusivamente, para estudiar el nivel de ruido generado por los aviones
    • curva U(dBU). Es la curva de más reciente creación y se utiliza para medir ultrasonidos, no audibles por los seres humanos.
  • De igual modo que se permite realizar ponderación en frecuencia, la circuitería electrónica también permite hacer una ponderación en el tiempo (velocidad con que son tomadas las muestras). Existen cuatro posiciones normalizadas:
    • Lento (slow, S): valor (promedio) eficaz de aproximadamente un segundo.
    • Rápido (fast, F): valor (promedio) eficaz por 125 milisegundos. Son más efectivos ante las fluctuaciones.
    • Por Impulso (impulse, I): valor (promedio) eficaz 35 milisegundos. Mide la respuesta del oído humano ante sonidos de corta duración.
    • Por Pico (Peak, P): valor de pico. Muy similar al anterior, pero el intervalo es mucho más corto entre los 50 y los 100 microsegundos. Este valor sirve para evaluar el riesgo de daños en el oído, ante un impulso muy corto pero muy intenso.
Como cualquier otro instrumento, el sonómetro cuenta con una gran gama de accesorios (además de los que les posibilita su propia electrónica):
o        Calibradores acústicos portátiles. Para ajustar los sonómetros se utilizan los calibradores acústicos, aparato que genera un sonido estable a una determinada frecuencia. Se sabe el nivel que debe producir el sonómetro tras la medición, por lo que para ajustar el sonómetro se hace la medición y, si todo está correcto, el nivel ofrecido por el sonómetro será el mismo que se tenía de antemano.
o        Trípodes
o        Pantallas antiviento
o        Extensores
o        Fuentes de alimentación
o        Maletas de transporte
o        Filtros: deben cumplir con la norma EN 61260/ IEC 1260 (1995)


sábado, 9 de julio de 2011

Un sistema permitirá medir la contaminación acústica en el mar por internet

El Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas (LAB) de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) ha desarrollado un sistema equipado con hidrófonos que registra en tiempo real y a través de internet los sonidos del fondo marino y ayudan a identificar la presencia de cetáceos y la contaminación acústica provocada por el hombre.
El sistema, que analiza cómo los ruidos producidos por la actividad humana pueden afectar al hábitat natural de los cetáceos y el equilibrio de los océanos, es un primer paso para la elaboración en España de una legislación contra este tipo de contaminación y ajustarse así a la nueva directiva europea del mar que todos los países comunitarios han de cumplir.
En 2007, el LAB inició el proyecto Listening to The Deep Ocean Enviroment (Escuchando el entorno del profundo océano) para evaluar cómo los ruidos artificiales (transporte marítimo, pesca, construcciones, maniobras militares, entre otras) influyen en la calidad de vida de los cetáceos, les provocan enfermedades e incluso la muerte, han informado hoy los responsables del proyecto por medio de una nota de prensa.
Ahora el LAB, dirigido por Michel André, ha desarrollado algoritmos que interpretan estos sonidos de forma automatizada, los clasifican -si son biológico o antropogénicos- e identifican la especies de cetáceos que hay en el área, un sistema que permite un ahorro considerable de tiempo y de recursos.
Esta tecnología evita que el flujo continuo de datos acústicos sin analizar sature los discos duros de los centros de investigación.
Las señales acústicas y el resultado del análisis se pueden escuchar y visualizar en directo a través de una web accesible para la comunidad científica internacional y aficionados (http://listentothedeep.com).
Los expertos indican que el ruido se ha convertido en la amenaza más importante para el equilibrio del medio marino, ya que el oído es vital para los cetáceos, que lo utilizan para buscar presas, orientarse, emigrar o relacionarse entre ellos
La red de 13 hidrófonos está instalada en más de una decena de plataformas submarinas ubicadas por todo el planeta.
Hasta ahora se había relacionado el aumento de los varados masivos de ballenas, cachalotes y otros cetáceos en las playas por el incremento de ruido producido por la pesca y otra actividades humanas, y gracias a este sistema se podrá establecer protocolos de actuación para reducir daños.
El LAB ha redactado un manual de buenas prácticas para la gestión de la contaminación acústica en el mar, por encargo del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.
En los próximos años el tráfico marítimo en la cuenca mediterránea aumentará notablemente para mitigar la contaminación atmosférica derivada del transporte de mercancías por carretera.
La LAB tiene previsto desarrollar tecnologías de alarma instaladas en diferentes apoyos, boyas autónomas o robots submarinos, que avisen de la aproximación de los cetáceos en áreas de nivel elevados de ruido y pongan en funcionamiento los protocolos de actuación.
El LAB centra, en particular, el estudio de la contaminación acústica en los cetáceos porque estos mamíferos marinos están en la parte más alta de la cadena alimentaria y sus actividades dependen del intercambio de información, y son considerados bioindicadores del equilibrio acústico.
La plataforma LIDO, que registra los ruidos submarinos de diferentes puntos de Europa y de Norateamérica, está abierta a la comunidad científica internacional.
El LAB ha cerrado una acuerdo con Japón para instalar la tecnología en 17 plataformas destinadas a la detección de riesgos de terremotos en el archipiélago asiático. EFE

sábado, 2 de julio de 2011

Noticia 4

TORRELAVEGA
La contaminación acústica supera los límites aconsejables, según un estudio
Un informe del IES Zapatón desvela que el municipio es el segundo más ruidoso del país, de entre los que tienen 50.000 y 80.000 habitantes 
02.07.11 - 00:15 - 
MARIO CERRO | TORRELAVEGA.


Torrelavega es una ciudad con una alta contaminación acústica e, incluso, en algunas zonas, como la de Cuatro Caminos, se superan los niveles aconsejables. Esta es la principal conclusión que se desprende del proyecto de innovación tecnológica que ha llevado a cabo el IES Zapatón, en colaboración con la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria. Según el estudio, realizado por un grupo de alumnos y coordinado por el director del centro Eduardo Solís, la ciudad del Besaya es la segunda más ruidosa de España, de entre aquellas que tienen entre 50.000 y 80.000 habitantes, sólo superada por Cáceres.
Para hacer el estudio se llevó a cabo un mapa de ruido de Torrelavega, a través de un estudio estadístico en el que se utilizó una técnica de muestreo temporal. Así, se midió el nivel de ruido durante intervalos de tiempo, relativamente cortos y en diferentes tramos horarios. Del total de puntos medidos, el 75,86% superaron los 65 decibelios, límite aceptable durante el día, según las diferentes legislaciones europeas, aunque un informe publicado por la Universidad de Estocolmo para la Organización Mundial de la Salud, considera los 50 decibelios como límite deseable.
El estudio detectó los picos máximos de contaminación acústica en las diferentes rotondas de la ciudad -el más alto se encontró en la rotonda del IES Miguel Herrero con 94,6 decibelios-, siendo la zona de Cuatro Caminos y sus calles la más ruidosa (en innumerables ocasiones se superaron lo 80 decibelios). Una situación que califican de «preocupante».
Causas
La causa predominante de la contaminación acústica se achaca a la circulación de vehículos y, en menor medida, a la aglomeración de personas conversando en voz alta en zonas determinadas. Los picos frecuentes se deben en su mayoría a vehículos pequeños, como automóviles, motocicletas y furgonetas, mientras que los picos escasos, de mayor nivel, se deben a vehículos que dan acelerones o frenazos o a motocicletas, autobuses u otros vehículos con el escape en malas condiciones.


El estudio también contempla que en algunas zonas de la ciudad es habitual el estacionamiento inadecuado, que incrementa los ruidos al obstaculizarse el desarrollo del tráfico. Como ejemplo, hacen mención al excesivo ruido que se produce a la salida de los centros educativos. Calles con edificios de gran altura, calzadas estrechas y vías de doble sentido de circulación son factores que contribuyen «enormemente» al incremento global de los niveles de ruido.

El informe recuerda que la contaminación acústica puede producir «efectos fisiológicos y psicológicos nocivos para las personas». España es el segundo país con más índice de población expuesta a altos niveles de ruido, sólo superada por Japón. Casi nueve millones de españoles soportan niveles superiores a los 65 decibelios.